¿Necesitas un lunch para niños rápido y fácil? Aquí te tenemos algunos platillos perfectos –de lo básico a lo saludable– para llevar a la escuela.
El regreso a clases está aquí y con él también regresó una pregunta que todo padre se hace en las mañanas: ¿qué le debo hacer de lunch a mis hijos? Muchas veces, estos platillos tienen que ser fáciles de conservar, rápidos de conservar y nutritivos, además de deliciosos. Si estás en una carrera contrarreloj con el autobus escolar y necesitar preparar el desayuno que tus pequeños se llevarán a la escuela, aquí tenemos 20 recetas perfectas de lunch para niños para sacarte de cualquier problema.
¿Qué le pudo dar de lunch a mi hijo?
Aunque las prisas te coman, es importante que siempre consideres que el lunch perfecto para tu hijo debe ser aquel que sea equilibrado y proporcione nutrientes que le aporten la energía necesaria para terminar el día.
De acuerdo con especialistas en nutrición, un lunch perfecto debe considerar –al menos– 5 cosas: frutas, vegetales, carbohidratos, proteínas y agua. Las frutas, especialmente las frescas como fresas, manzanas, naranjas y uvas, son ricas en vitaminas, antioxidantes y fibra, elementos perfectos para el estudio y el día a día. Lo mismo sucede con las verduras, principalmente aquellos cuya coloración es verde –como el brócoli, las espinacas y la lechuga– pues contienen niveles altos de minerales buenos.
Los carbohidratos son la principal fuente de energía y se pueden encontrar en el pan, arroz, avena, pasta y diversas legumbres. Mientras que las proteínas permiten el crecimiento si son magras, como el pollo, el pavo, el pescado, el tofu y el queso. Sin olvidar, por supuesto, el agua que permite la hidratación esencial para el funcionamiento del cuerpo.
¿Cómo hacer un buen lunch para niños?
Para hacer un buen lunch deberás considerar los 5 indispensables de todo desayuno: frutas, verduras, carbohidratos, proteínas y agua.
Además de estos elementos, los expertos recomiendan añadir grasas saludables como las contenidas en el aguacate, las semillas y los frutos secos pues aportan nutrientes benéficos para la función cerebral y la salud cardiovascular. Los productos lácteos bajos en grasa pueden redondear cualquier lunch si se agregan cada determinado tiempo.
Por último, no hay que olvidar que los azúcares y alimentos ultraprocesados, principalmente los refrescos, jugos artificiales y aquellos productos etiquetados como comida chatarra, deben ser vistos como un regalo extraordinario para el paladar más que como un acompañante fácil de los lunch escolares. Sustitúyelos con aguas, jugos y batidos naturales, así como snacks fáciles de hacer en casa con muy poca grasa, incluyendo papas fritas hechas con aceite de oliva o chips de camote y calabaza.