Dile adiós de una vez por todas a la humedad que suele aparece en tu hogar con ayuda de estos sencillos y útiles consejos. La humedad en el hogar es más común de lo que puedas imaginar, básicamente es un problema que afecta las condiciones de las habitaciones y los muebles, generalmente se produce por los materiales de la casa, las condiciones climáticas o la falta de ventilación que tienen algunos espacios. Es importante tratar la humedad en casa ya que además de producir un mal olor y deteriorar tu hogar, así como tus muebles, también puede afectar directamente la salud de toda tu familia, ya que suele relacionarse con problemas dermatológicos y respiratorios, como alergias. Te interesa: Cómo limpiar la estufa paso a paso fácilmente
CONSEJOS FÁCILES PARA ELIMINAR LA HUMEDAD DE TU HOGAR
- Buena ventilación en cada habitación, lo ideal es mantener las ventanas abiertas por la mañana, al menos 10 minutos.
- Identifica las fuentes de las que proviene la humedad, una pared, rincón, muebles o armarios.
- Evita tender la ropa húmeda en el interior de la casa, si no cuentas con un espacio abierto, solo mantén abiertas las ventanas de la habitación en la que sueles tenderla.
- No intentes cubrirla con pintura o muebles, esto en lugar de frenar el problema, lo empeora.
- Coloca sobres o saquitos absorbentes de humedad en los armarios.
- Mantén ventilados los baños y la cocina, son las habitaciones más húmedas de la casa, sobre todo después de que alguien se ducha o mientras cocinas.
- Aplica un deshumificador en las zonas afectadas para desaparecerla.
- Coloca los muebles un poco separados de las paredes para que permitas la ventilación de todos los espacios.
- Aplica un impermeabilizante en la azotea de tu casa, sobre todo antes de la temporada de lluvias.
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4 DESHUMIFICADORES CASEROS
- Vinagre: Mezcla 1/2 taza de vinagre blanco con 62 ml de agua, vierte en una botella con atomizador, agita y rocía las manchas, deja ventilar para que se seque. Repite por toda una semana seguida.
- Sal marina: Colócala en pequeñas bolsas y déjalas al interior de los muebles u armarios, así como los rincones húmedos, cámbialos al menos una vez al mes.
- Bicarbonato de sodio: Frota las manchas con un poco de bicarbonato, deja reposar por 2 horas y retira con un cepillo.
- Bórax: Utiliza guantes especiales para manipular este material, diluye 1 cucharada en 2 litros de agua, aplica en la zona con ayuda de un cepillo, deja reposar por media hora y retira el exceso con un paño limpio.
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